¿Dónde trabajar? Hoy los candidatos eligen la empresa
Actualizado: 30 ago 2022
Hoy los candidatos son más exigentes en sus búsquedas laborales y dónde trabajar significa más que obtener un buen sueldo a fin de mes.
¿En qué empresa mundial te gustaría trabajar?
¿Google?
Si es así, eres parte de un grupo mayoritario de personas (da igual el país) al que le encantaría desarrollar su carrera profesional en este gigante de la tecnología.
Lo que les atrae es su cultura corporativa, donde uno de sus aspectos relevantes es su componente lúdico. Así, los Googlers —como ellos mismos se hacen llamar— están rodeados de estímulos que les ayudan a distraer la mente y a fomentar la creatividad.
Y entre otras tantas ventajas, también se les permite dedicar 20% de su tiempo a proyectos propios. De hecho, si Google les ve potencial es posible que les ofrezca comprarlos.
Suena bien, ¿no?
Hoy en día, que las empresas conecten con el propósito personal de sus colaboradores (y de los candidatos) es uno de los principales desafíos de las compañías sumado a ser —y no solo parecer— una marca coherente.
No son pocas las empresas que hablan, por ejemplo, de igualdad de género, pero no tienen a mujeres en puestos directivos; sobre la importancia de la innovación, pero en la práctica siguen siendo tradicionales; sobre el cuidado del medioambiente, pero no se preocupan de cuidarlo; o que señalan que su prioridad son los clientes, pero no les dan un adecuado servicio.
Los nuevos candidatos son:
Más exigentes.
Tienen mayor conciencia social.
Buscan mantener un equilibrio entre sus valores y los de la organización donde trabajarán.
Reputación de la empresa
Cuidar la reputación de la empresa es esencial. ¿Estarías dispuesto a trabajar en una organización que no tiene ética empresarial? Lo más probable es que tu respuesta sea como la nuestra: no.
En palabras sencillas, la reputación empresarial viene siendo la imagen que se proyecta y la percepción que la sociedad —incluidos los grupos de interés o stakeholders— se forma tras valorar las acciones que la empresa realiza (internas y externas).
Bien saben de esto, entre otras, la industria de la moda y forestal que han debido implementar actividades de responsabilidad social enfocadas en la conciencia con el medioambiente para aminorar las críticas.
Aunque también hay otras que han nacido de la motivación por ayudar.
Reconocimiento de sus logros
Los candidatos sienten mayor interés por aquellas empresas en las que encuentran bienestar y en las que son reconocidos por su trabajo.
Para ellos, tener feedback de parte de sus superiores es necesario para saber lo que piensan sobre su desempeño. De lo contrario, se sentirán insatisfechos y, muy posiblemente, haya consecuencias en el rendimiento.
Y, ojo: si como empleador, generalmente, te comunicas con ellos para regañarlos también puede generar un impacto negativo. Hay una gran diferencia entre ayudar a corregir un error y reñir.
Llamar la atención a los miembros de un equipo solo por sus equivocaciones desmotiva y agota hasta al más optimista. En décadas pasadas, esta solía ser una práctica habitual. Pero en el siglo XXI, los colaboradores esperan una comunicación desde lo constructivo y que se les reconozcan sus aciertos.
El salario emocional y flexibilidad horaria
El salario emocional son los beneficios no económicos que las empresas pueden aportar a sus colaboradores y que les permitirán aumentar la motivación, su bienestar laboral y por qué no su calidad de vida (espacios de trabajo cómodos, días extras de vacaciones, programas de capacitación, entre otros).
Dar la posibilidad a los colaboradores de desarrollar sus aptitudes y de adquirir nuevos conocimientos y habilidades —mediante formaciones o certificaciones— son una inversión (no un gasto), que les aportará autoestima y mejores herramientas para ejecutar sus tareas.
A los candidatos de las nuevas generaciones también les atrae trabajar en entornos laborales con horarios flexibles al igual que en aquellos en los que se utiliza el trabajo remoto o teletrabajo. Para ellos, conciliar el desarrollo de su profesión con su vida privada es fundamental.
Con la revolución de IoT (Internet de las Cosas) y la facilidad de “llevar la oficina” en pequeños dispositivos móviles, no son pocos los trabajadores que se preguntan ¿por qué seguir anclados a un espacio físico?
Atrás quedan los años en los que las personas debían estar dispuestas a dedicar parte de sus vidas al trabajo en un lugar determinado y a hacer que todo lo demás (familia, ocio, vacaciones) girara en torno al empleo. Se trata de una visión anticuada que no encaja con dos aspectos altamente valorados hoy: la libertad y la flexibilidad.
Tener opinión y un ambiente de trabajo saludable
Los nuevos trabajadores valoran positivamente una estrategia de colaboración interna, en la que la relación con sus jefes y compañeros sea cercana y horizontal. Eso significa poder opinar y participar.
Los trabajadores jóvenes quieren tener voz en su equipo y que se les haga partícipe de las decisiones. Sentirse valorados y respetados es una exigencia básica.
Esto va de la mano con tener un ambiente de trabajo saludable.
“La riqueza de las empresas depende de la salud de los trabajadores”, sostiene la Organización Mundial de la Salud. La misma entidad que en 2019 reconoció como enfermedad al “burnout” o “desgaste profesional”, un trastorno emocional que aparece a consecuencia del estrés laboral crónico y a la incapacidad de desconectar del trabajo afectando a la salud mental y física.
Lo anterior es un tema pendiente para una parte importante de las empresas en todo el mundo. El 76% de las personas cree que su empresa debería hacer más para proteger la salud mental de sus colaboradores, de acuerdo a un estudio de Oracle y Workplace Intelligence.
Crear ambientes transparentes, honestos y en los que se puedan compartir inquietudes o experiencias es clave.
Los departamentos de Recursos Humanos deben lograr conectar las metas corporativas con las de sus colaboradores, entendiéndolos, dándoles oportunidades, descubriendo sus motivaciones.
Para los candidatos de hoy es importante que esto suceda. Hay una alta probabilidad de que no quieran trabajar allí si esto significa sacrificar su libertad, sus valores o ambos.
¿Tu empresa ya comenzó a adaptarse a estos cambios?
Si te gustó este blog, también te podría interesar este eBook:
Comments