Habilidades conductuales: qué son y 5 ejemplos
Evaluar las habilidades conductuales puede ser decisivo para determinar cómo un candidato se relacionará con otros, manejará diversas situaciones en el entorno laboral y se adaptará a la cultura organizacional. Descubre cuáles son las que debes indagar en tus procesos.
¿Qué tanto conoces a tus candidatos antes de contratarlos?
Un CV es buen punto de partida para conocer su trayectoria, pero es solo un primer acercamiento a través de una hoja de vida para formarse una idea inicial del postulante y de quiénes deberían pasar a la siguiente etapa de selección.
El desafío, entonces, está en obtener información más profunda que sea comprobable y medible, y que permita encontrar a los mejores talentos para un cargo.
Por ejemplo…
¿El candidato tiene iniciativa?
¿Qué nivel de creatividad posee?
¿Se adapta a los cambios?
Aquí es cuando entran en juego las habilidades conductuales. Evaluarlas es clave para identificar a quienes cuentan con los requerimientos asociados al cargo y, por ende, pueden tener un buen desempeño en su entorno laboral.
Qué son las habilidades conductuales
Las habilidades conductuales son características vinculadas al comportamiento de una persona, que influyen en la forma en que interactúa con otros y en cómo responde a determinadas situaciones en un contexto profesional. Por lo tanto, como encargado de selección, puedes medirlas a través de la conducta de los candidatos.
Entre otros asuntos, estos rasgos son fundamentales para:
Adaptarse al entorno laboral.
Desempeñarse en tareas con otras personas.
Actuar con altruismo.
Tipos de habilidades conductuales
Las habilidades conductuales van más allá de las competencias técnicas, y repercuten directamente en el éxito y la adaptación de un trabajador a un rol o una organización.
Existen distintos marcos para clasificar las habilidades conductuales.
Por ejemplo, el Proyecto Step 4-SFC, cofinanciado por el Programa Erasmus+ de la UE para concientizar sobre la importancia de las habilidades conductuales, establece 3 tipos de habilidades conductuales:
Organizativa: el individuo reacciona en relación a la calidad de su trabajo. Por ejemplo, priorizando una acción o anticipándose a un resultado.
Social o interpersonal: la persona reacciona ante los demás y establece relaciones. Por ejemplo, negociando o cooperando.
Emocional: el trabajador reacciona ante sí mismo y ante sus propios límites. Por ejemplo, adaptándose a su contexto laboral.
Características de las habilidades conductuales
A continuación, te compartimos las características más destacadas de estas habilidades:
Son medibles y, por ende, comprobables. Para ello, existen distintas herramientas de evaluación que compartiremos en este artículo.
Impactan significativamente en las relaciones interpersonales y en el ambiente laboral. De hecho, una buena habilidad conductual puede mejorar la dinámica de un equipo y la productividad.
No se limitan a un campo o rol específico, lo que las hace valiosas para diversos entornos laborales.
Pueden ajustarse y perfeccionarse con el tiempo, la práctica y la experiencia.
¿Hay diferencias entre habilidades conductuales y competencias conductuales?
¡La pregunta del millón!
De seguro has visto que ambos términos se emplean como sinónimos, y la verdad es que ocurre habitualmente. Sin embargo, insistir en ello es un error.
¿La razón?
Este conjunto de habilidades del que hemos hablado hasta ahora y que permite entender cómo los candidatos se adaptan a los entornos de trabajo y reconocen emociones, forman parte de las competencias conductuales. Sí, ¡tal como lo lees!
Es decir, estas últimas engloban un concepto mucho más amplio que el de las habilidades, al incluir también los conocimientos y aptitudes de un postulante. Por lo mismo, son mucho más complejas de medir. Se requieren herramientas que permitan profundizar con más detalles en los aspectos del candidato. Por ejemplo, las entrevistas.
Importancia de las habilidades conductuales en la selección
Como hemos visto, la selección de candidatos con base en la conducta permite medir comportamientos esenciales para el buen desempeño laboral, abriendo un abanico más amplio de evaluación que no se centre únicamente en la experiencia y los títulos académicos.
Y la Sociedad para la Gestión de Recursos Humanos (SHRM), tiene una opinión clara al respecto:
“Este enfoque ayuda a los empleadores a comprender mejor cómo los candidatos afrontarán determinadas tareas y cómo encajarán en el equipo. También garantiza que se seleccione a las personas más adecuadas para puestos específicos y que su estilo de trabajo se adapte mejor a las necesidades de la organización”.
¿Dónde está la clave?
En combinar métodos que te permitan robustecer la calidad del proceso de selección de personal. Por ejemplo, podrías aplicar evaluaciones conductuales junto a pruebas de habilidades cognitivas, que está demostrado que ayudan a predecir el desempeño laboral de los candidatos.
¿Algo más? Una entrevista estructurada para evaluar competencias específicas.
Por otro lado, los métodos de evaluación gamificados también tienen el potencial de extraer información sobre el comportamiento de los candidatos (Armstrong, Landers et al., 2016b en “Gamification in employee selection: The development of a Gamified assessment”, Georgiou et al., 2019).
👉 Si este tema te interesa, revisa ¿Qué es gamificación? ¿Es lo mismo que una evaluación basada en juegos?
Ejemplos de habilidades conductuales y cómo medirlas
Saber qué medir es de suma importancia para concretar un proceso de selección exitoso que culmine con la contratación de talentos.
En concreto…
Las evaluaciones conductuales —consideradas pruebas psicométricas— deben hacer hincapié en medir el nivel actual de las habilidades del candidato en situaciones laborales comunes (Cone & Hawkins, 1977 en “Behavioral Assessment of Job-Related Skills”, Mathews, Whang & Fawcett, 1981).
Eso implica que como evaluador es indispensable conocer los detalles de cada cargo para identificar tales situaciones.
En ese sentido, ¿qué habilidades conductuales deberías evaluar?
1. Altruismo
Incorporar personas altruistas a los equipos puede contribuir a crear un ambiente de trabajo colaborativo donde destaca la ayuda entre pares, incluso cuando no se obtiene una recompensa personal directa. Es decir, esta habilidad conductual genera una disposición para actuar desinteresadamente por el beneficio de los demás.
⚠️ Pero es necesario entender el nivel de altruismo necesario para cada cargo.
Los cargos donde prevalecen metas individuales (por ejemplo, ventas) se ven beneficiados por contar con menores niveles de altruismo.
Mientras que un mayor nivel de altruismo es adecuado para trabajos de voluntariado donde el foco está en ayudar a los demás.
En la plataforma de Genomawork puedes evaluar esta habilidad mediante juegos.
2. Habilidad para reconocer emociones
Quien reconoce emociones es capaz de identificar emociones a través de las expresiones faciales y así comprender cómo se sienten los demás. Esta habilidad es esencial para entender a los demás cuando se expresan y fomentar un ambiente de respeto y comprensión mutua dentro y entre los equipos de trabajo.
Con las evaluaciones gamificadas de Genomawork puedes medir este rasgo en los candidatos y obtener resultados de alta precisión a partir de datos imparciales y predictivos.
3. Disposición para esforzarse
Esta habilidad refleja la tendencia del candidato a mostrar dedicación para enfrentar desafíos —contribuyendo al éxito de proyectos y metas individuales o colectivas— independiente de que las tareas asignadas sean difíciles o exijan un esfuerzo extra.
¿Cómo evaluarlo?
Mediante evaluaciones basadas en juegos de corta duración (2 a 4 minutos), podrás obtener información objetiva sobre la conducta de tus candidatos frente al esfuerzo. ¡Y disminuir así los tiempos para encontrar a los mejores talentos para un cargo!
👉 Conoce más sobre nuestras evaluaciones conductuales.
4. Fit cultural
El enfoque del ajuste cultural implica encontrar talentos que compartan y se alineen con los principios de la empresa. Por ende, al evaluar es importante ir más allá de los aspectos técnicos. Hay que profundizar en las preferencias asociadas a:
Formas de trabajo.
Valores y ética de trabajo.
El modo en que se relacionan con otros.
En ese sentido, Genomawork cuenta con una Evaluación de cultura organizacional que a su vez ofrece a los postulantes un proceso gamificado, ¡lo cual hace que todo sea más entretenido!
Al finalizar el proceso, los candidatos reciben retroalimentación que les permite conocerse mejor y comprender lo que necesitan potenciar o mejorar. En simple, ¡una experiencia de postulación memorable!
5. Creatividad
Tener trabajadores creativos potencia la adaptabilidad a los cambios, aporta una perspectiva más amplia para enfrentar múltiples desafíos e impulsa el crecimiento empresarial.
No se trata solo de su aplicación en el arte o el diseño, la creatividad se usa casi en cualquier puesto.
De hecho, en otro artículo te contamos cómo Steve Jobs y su equipo lograron mejorar la imagen de Apple, reforzar la lealtad de los consumidores y atraer a nuevos clientes. La generación de nuevas ideas y la búsqueda de soluciones efectivas fueron parte de la fórmula que los llevó al éxito.
Puedes revisar la historia en 👉5 beneficios de contar con trabajadores creativos.
💡 DATO:
Un estudio de McKinsey Global Institute, destacado por The Wall Street Journal, predice que la demanda de creatividad experimentará un crecimiento significativo para 2030, a medida que la automatización continúe cambiando las habilidades requeridas por las empresas.
Dicho esto, en Genomawork podrás aplicar un test de creatividad para evaluar las capacidades semánticas y creativas de tus candidatos.
Esta prueba se puede aplicar a todo tipo de perfiles, pero te recomendamos administrarla especialmente para roles como:
Supervisores.
Ingenieros Junior.
Ingenieros Senior.
Key account manager (KAM).
Analistas Senior.
Científicos de Datos.
Jefes de Área.
Managers.
Y bien, ¿estás evaluando estas habilidades conductuales en tus candidatos? No olvides que hacerlo es elemental para que tus nuevas contrataciones se adapten adecuadamente al rol y responsabilidades del cargo.
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